En el momento del Big Bang (gran explosión que da inicio al Universo), el AIN SOPH AUR (lo inmanifestado) entra a la manifestación. En ese preciso instante comienza el tiempo, el cual servirá de marco al desarrollo pleno de la ENCARNACION DE LA INTENCION DE LA MENTE DIVINA.
Es la mente divina la que comienza a encarnarse en el momento del Big Bang. Para hacerlo se contrae a sí misma en una minúscula partícula, ante la cual una lenteja resulta extremadamente gigantesca.
Lo irrebatible de ese hecho, la belleza de ese instante primordial, nos coloca ante la indiscutible santidad del Universo.
*ES DIOS QUIEN SE CONTRAE DE ESA FORMA Y SE TRANSFORMA EN UNA MINUSCULA PARTICULA, CON TEMPERATURA Y DENSIDAD INFINITA.
*Es Dios quien se expele a sí mismo, instantes más tarde, en una gran explosión.
*Es su fluido mental quien, fracciones de segundo más tarde, se transforma en materia (En esta etapa, el equilibrio de la materia y la antimateria se decanta a favor de la materia.)
*Es su actividad mental quien, al instante mismo en que la materia prevalece sobre la antimateria, se transforma en las leyes físicas que hacen posible la formación de los primeros quarks y antiquarks, hadrones y leptones, protones, neutrones, mesones y otros bariones.
*Es El quien tan solo un segundo después de la Gran Explosión ya se ha transformado en núcleos de hidrogeno, helio, litio y deuterio.
*Es EL quien 3 minutos después se ha transformado en los primeros átomos estables.
*Es El quien mil millones de años después se ha transformado en quásares, estrellas y protogalaxias.
*Es El quien a los casi once mil millones de años luego del Big Bang ha tomado la forma de nuevas galaxias con sistemas solares alrededor de las estrellas.
*Es El quien a los once mil quinientos millones de años después de su encarnación se ha transformado en moléculas complejas, entre las cuales están las moléculas biológicas, el ADN y las primeras formas vivas.
*Es El quien luego de quince mil millones de años se ha trasformado en seres vivos inteligentes, entre ellos el Hombre.
Han transcurrido tan solo 15.000 millones de años desde que los sonidos esenciales (Elohim) se concentraron en esa partícula primordial y luego, al explotar ésta, se esparcieron en el tiempo y en el espacio, iniciando así una inteligente trayectoria que los ha ido trasformando, de instante en instante, en algo ya preconcebido en el insondable Ain.
HACE APENAS 500.000 AÑOS ESOS SONIDOS SE TRANSFORMARON EN HOMBRE
Las preguntas que debemos hacernos ahora son:
*¿Está el Hombre terminado, o todavía estos sonidos recorren el tiempo y el espacio buscando completarse, terminarse, conformarse en aquello perfecto que la Mente Divina concibió?
*¿Cómo ha de ser el Hombre cuando estos sonidos terminen de encarnarse? ¿Estará destinado a vencer sobre la enfermedad, el dolor y la muerte?
*¿Será el 2012 el final de una etapa de tiempo en este recorrido y el comienzo del transitar del sonido divino en una nueva área del espacio?
Definitivamente el desarrollo de la mente humana está comenzando. Estamos apenas saliendo de la prehistoria. Hace poco más de un siglo que hemos comenzado a dar un pequeño salto cuántico en el conocimiento. Este salto no ha terminado. ¿Que son 100 años en el marco de los 500.000 años desde que esos sonidos se transformaron en Hombre?
Sin duda, estamos a las puertas de un nuevo orden de evolución. La mente del Hombre de la tierra se está desplegando y se está contactando telepáticamente con otros seres que, colocados en otras regiones del espacio y el tiempo, ya han pasado por este punto que nosotros recorremos ahora. Es un contacto que ni siquiera el dolor, la enfermedad y la muerte puede evitar. El amor que ellos ya han logrado realizar nos está tocando la mente y al hacerlo se descodifica y nos señala el camino:
¡Adelante! El horror que viven es transitorio pues tan solo es un área oscura que ahora atraviesan en el camino hacia la luz.
Son estos seres amorosos quienes nos han indicado lo que debemos hacer antes de comenzar a transitar la nueva área que se despliega ante nosotros, una vez que comencemos a salir del área de tinieblas dentro de las cuales hemos estado viviendo todo este tiempo.
Esta nueva área esta llena de ondas-partículas que vibran en una alta frecuencia.
Nuestros vehículos inferiores, que por mucho tiempo han estado adaptados a recibir frecuencias bajas, ahora deben ser sometidos a una intensa depuración y trasformación. He ahí la razón para instituir La Ronda Sagrada de los Elohim y la reunión anual en Yom Kipur, tiempo en el cual la conciencia amorosa del pueblo trascendido de Israel -la Inteligencia superior constituida en la más alta Jerarquía- nos envuelve para realizar junto con nosotros jornadas de transmutación o perdón. Lo haremos hasta que podamos transformar esos cuerpos inferiores en columnas de fuego del templo viviente de Dios. Ser Fuego Divino encarnado es la culminación de la idea almacenada en la partícula elemental que dio lugar al Big Bang. Por ello, los 144.000 maestros ascendidos trabajan con aquellos santos, justos y científicos que están sobre la Tierra, en contacto directo, para hacer descender a la mente colectiva el Adam Kadmon (Toda la creación concluida ya existe en la octava dimensión como esquema de energía. igualmente el Hombre o Adam Kadmon). Esta es la única razón que justifica la emanación del Universo.
¿Que se nos prescribe este año para dar un paso hacia delante en la encarnación del Adam Kadmon en nosotros y luego en la mente colectiva?
Los 22 Elohim son bloques vibratorios elementales de construcción de la idea divina. Por ello, durante mucho tiempo, los iniciados de Israel, han estado sembrando al planeta con sus formas pensamiento. Por esa razón en el Plan Arcturus se nos ha insistido tanto en la construcción de las formas pensamiento de Elohim. Ahora se nos hace hincapié en el sonido. Solamente a través de las formas pensamiento y los sonidos de Elohim podemos conectarnos con las diversas vibraciones de los niveles superiores, a través de los cuales podemos acceder al Esquema divino del Adam Kadmon (carroza divina o Mercabah).
¿Cómo iniciar este Éxodo hacia nuevas esferas de conciencia, donde no existe ningún esquema humano?
Para lograr movernos hacia estas nuevas esferas de conciencia, las formas pensamiento y el sonido de los veintidós nombres divinos de Elohim deben ser adaptados a la nueva realidad espacial en la cual estamos penetrando.
Relativo a las formas pensamiento se nos ha indicado cómo hacer de los mandalas de cada Elohim un espacio vibrante de color y sonido. Para ello, cada color constituyente del mandala de aquí en adelante será cantado. Quedando entonces cada mandala articulado con la sumatorias de las frecuencias herzianas de cada color. De esta forma color y sonido se constituirán en una entidad viviente, en un bloque vibratorio, cuyas energías actuarán en el ADN hasta transformarlo en el ADN del Adam Kadmon.
Sin embargo, para llegar a ser esta Carroza Divina, todo programa humano - redes neuronales- almacenado en nuestros cuatro vehículos inferiores debe morir. Solo muriendo tendremos acceso a la vida eterna.
Todo concepto, todo esquema de conducta, todo programa humano, es un cúmulo de energía vibrante. Estos cúmulos de energía vibrante se alojan, al final de su acción, en el cuerpo físico, destruyendo sus patrones de armonía y perfección originales. Pero antes de llegar al físico desfiguran, obstruyéndolos, los patrones etéricos conocidos como los doce meridianos chi. ¿Cómo, entonces, pueden descender los esquemas de la carroza divina hasta el cuerpo (Malkuth) si estos cúmulos de energía tienen obstruido el paso a través de los doce meridianos?
Cada uno de estos doce meridianos nos conecta con un aspecto especial o espacio dimensional del Adam Kadmon. En la Kabbalah estos doce aspectos constituyentes del Adam Kadmon se conocen como los arquetipos psíquicos de las doce Tribus de Israel, Jesús los llamo APOSTOLES. Es oportuno recordar, que él, antes de lograr penetrar a la dimensión crística, PRIMERO SE DIO A LA TAREA DE REUNIR Y DE RESCATAR A ESOS DOCE ARQUETIPOS SIQUICOS, sin los cuales no podría llegar a ser una entidad crística concluida. Por ello, está escrito que el final de toda historia humana debe tener lugar después de un EXODO, es decir, de una movilización de nuestra conciencia hacia estos doce espacios dimensionales de nuestro ser.
